La inesperada amistad entre Ozzy Osbourne y Matthew Perry, unida por la lucha contra la adicción
- efectoparallax5
- hace 5 días
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En un revelador extracto de la memoria póstuma Last Rites del legendario rockero Ozzy Osbourne, publicada el 7 de octubre de 2025, se destapa una amistad poco conocida entre el "Príncipe de las Tinieblas" y el actor Matthew Perry, estrella de Friends. Ambos, marcados por décadas de batallas contra el abuso de sustancias, se unieron en reuniones de Alcohólicos Anónimos (AA) en la casa de Osbourne, donde compartieron risas, dolor y un compromiso feroz por la sobriedad.
Esta conexión, que Osbourne describe con calidez y empatía, resalta cómo la vulnerabilidad humana trasciende géneros musicales y pantallas de TV.
¿Por qué eran amigos? Detalles clave de su vínculo
La amistad entre Osbourne (1948-2025) y Perry (1969-2023) no surgió de colaboraciones profesionales ni fiestas salvajes, sino de un terreno común: la adicción como un "explosivo sin detonar que nunca puedes soltar", como lo define Ozzy en su libro. Aquí van los detalles más impactantes:
Encuentros en AA en casa de Ozzy: Perry visitaba regularmente la mansión de los Osbourne en Los Ángeles para asistir a reuniones de AA. Ozzy escribe: "El tipo de Friends, Matthew Perry, solía venir a nuestra casa para las reuniones de AA, o eso me dice mi esposa". Aunque Ozzy a veces no recordaba todos los detalles debido a sus propias recaídas, Sharon Osbourne confirmaba estas visitas. Estas sesiones eran íntimas y privadas, un refugio para celebridades que buscaban anonimato en su recuperación. Perry, quien asistió a miles de reuniones a lo largo de su vida, encontró en estos encuentros un espacio de apoyo mutuo.
Admiración mutua por el esfuerzo: Ozzy elogia a Perry como "el tipo más gracioso y talentoso" que conoció, destacando su "esfuerzo tan duro por mantenerse en el camino correcto". Ambos habían lidiado con adicciones extremas: Ozzy con alcohol y drogas durante sus años locos en Black Sabbath, y Perry con opioides y alcohol desde su juventud, agravados por el estrés de la fama en Friends. En 2012, tras una recaída, Ozzy asistió a 90 reuniones de AA en 90 días, un ritual que lo ayudó a reconstruirse. Perry, por su parte, compartió en su memoir Friends, Lovers, and the Big Terrible Thing (2022) cómo la adicción lo llevó al borde de la muerte múltiples veces, afirmando: "Si muriera, chocaría a la gente, pero no sorprendería a nadie".
Reflexiones sobre la ketamina y la fragilidad: Ozzy menciona que consideró un tratamiento médico con ketamina (similar al que Perry usaba para tratar ansiedad y depresión), pero lo descartó por temor a recaer: "Noté un pequeño pero inconfundible cambio en la mente...
Nunca dejaré que la adicción me robe el espíritu otra vez". Trágicamente, Perry falleció el 28 de octubre de 2023 a los 54 años por una sobredosis accidental de ketamina en su jacuzzi de Los Ángeles. Ozzy, al enterarse, escribió con profundo dolor: "Un día escuchó a su adicción diciéndole que estaba bien drogarse, y eso fue todo: juego terminado. Me sentí tan triste cuando dijeron que lo encontraron sin respuesta en su jacuzzi, con ketamina en el sistema. Dio todo lo que tenía por mantenerse limpio, pero no fue suficiente".
Esta amistad simboliza la solidaridad en la recuperación: Ozzy, quien murió el 22 de julio de 2025 a los 76 años por complicaciones cardíacas y Parkinson, se convirtió en un defensor vocal de la sobriedad en sus últimos años. Perry, a su vez, inspiró a millones con su honestidad. Su conexión no era pública hasta ahora, pero resalta cómo el AA une almas rotas en un lazo inquebrantable.
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